domingo, 28 de abril de 2013

FOTOS DE TRIBERG NEVADO - STUTTGART - SCHWÄBISCH HALL - HEIDELBERG

TRIBERG NEVADO













SCHWÄBISCH HALL















STUTTGART













HEIDELBERG










SELVA NEGRA SEGUNDO DIA: STUTTGART-SCHWÄBISCH HALL-HEIDELBERG

30 DE MARZO DE 2013


Este es nuestro último día y lo vamos a aprovechar bien. Nada más levantarnos nos llevamos una grata sorpresa: nos encontramos todo blanco. Anoche empezó a nevar cuando volvimos de la catarata y siguió nevando un poco. Afortunadamente en su justa medida: no demasiado para poder irnos bien y no demasiado poco como para que no cuajara. Os pongo la comparativa para que veáis el antes (izquierda) y el después (derecha).



         




Vamos al comedor a desayunar y la verdad es que tenemos un buen desayuno buffet: pan buenísimo, embutido, fruta, yogures, cereales, bacon y huevo duro. Desayunamos bien y luego ya nos ponemos rumbo a Stuttgart. Hoy haremos la ruta Stuttgart-Schwäbisch Hall - Heidelberg.




Nada más salir de Triberg nos paramos a hacer una foto a otra tienda de relojes de cuco que es tiene la fachada de un reloj gigantesco. Ayer ya la vi y me quedé con las ganas de parar y hoy no iba a dejar pasar la oportunidad.  De camino hacia Stuttgart atravesamos bosques y paramos unas cuantas veces a hacer fotos con el maravilloso paisaje que tenemos ante nuestros ojos, todo blanco por la nieve.















En menos de dos horas llegamos a Stuttgart. Allí no hay nieve, aunque hace fresco y está nublado. Lo más famoso de esta ciudad es su centro y el museo Mercedes-Benz. Estaremos un rato por el centro y el museo lo dejaremos para otra ocasión. Al lado del parking donde dejamos el coche hay un mercadillo bastante grande. Lo atravesamos y comenzamos a pasear por las calles del centro. Tiene una calle peatonal larguísima donde están todas las tiendas de ropa que te puedas imaginar. La caminamos entera de ida y vuelta. Por lo visto esta tarde hay partido Stuttgart-Borussia Dormunt porque hay mucha gente vestida con las bufandas y demás. Vemos unos grandes almacenes especializados en deporte y entramos a ver si hay bufanda del Stuttgart para nuestra colección. La hay, y acabamos comprando más cosas porque está todo súper bien de precio. Las camisetas del Barça, por ejemplo que aquí valen 80 €, allí están por 50 €. Javi se compra los pantalones cortos del Borussia, una camiseta, medias y yo me compro la camiseta de la selección por 30 €. En total nos gastamos 94 € pero llevamos bastantes cosas.







Seguimos un poco más adelante y salimos a una plaza enorme que nos queda a la derecha con un palacio al fondo y una fuente. Por lo que veo en las postales, es uno de los puntos fuertes de la ciudad. Hacemos unas cuantas fotos y nos marchamos ya hacia Schwäbisch Hall, después de haber estado un par de horas paseando por aquí.











Llegamos a Schwäbisch Hall en una hora y media, aproximadamente. En la entrada del pueblo hay una pequeña zona azul donde se debe dejar el coche, ya que no se puede circular por el casco urbano. Todo es peatonal. El pueblo es precioso, muy pequeño y cuco, pero ambiente 0. No hay casi nadie y casi todo está cerrado, excepto alguna tienda. El pueblo es casi todo en cuesta, luego llegamos a un puente por el que pasa un río y después hay una especie de parque. Damos una vuelta y decidimos ir a comer, porque ya son las 14:00. Hay varios Biergarten, pero al final nos decidimos por una pizzería. Hoy hace más fresco y está muy nublado, por lo que el tiempo tampoco acompaña demasiado a quedarse por aquí.





Nos vamos a Heidelberg, donde llegamos también en una hora y media, más o menos. Heidelberg es una ciudad famosa porque es ciudad universitaria. Me imaginaba que sería un pueblo un poco mayor que Gengenbach pero me sorprendo al ver que es bastante grande Nos cuesta un poco llegar al casco antiguo porque no está bien indicado y nos hacemos un poco de lío. Para ello tenéis que buscar "alterstadt" que significa "ciudad antigua". También tiene una calle peatonal bastante larga, aunque no tanto como la de Stuttgart y en una colina tiene un castillo a lo alto. Más adelante hay un puente con lo que en su día serían seguramente "las puertas de la ciudad". Aquí hay mucho más ambiente. La calle está llena de gente y todas las tiendas están abiertas. Nos llama la atención que hay un montón de panaderías con cosas exquisitas. Por aquí pasamos ya lo que queda de tarde hasta las 8:30, cuando decidimos ir al hotel.



Esta noche nos toca dormir en un convento. Sí, el hotel donde vamos es un convento A ver qué tal.... El hotel está en Bühl, a 14 km del aeropuerto y a 10 de Baden-Baden, la capital de la región que lleva el mismo nombre. Al llegar al hotel, hay que atravesar una verja y hay como una garita donde hay una monja mirándome con cara de pocos amigos. Empezamos bien....Me bajo para preguntar y mostrarle mi confirmación de reserva. Es bastante más simpática de lo que parecía inicialmente y me explica en alemán dónde tenemos que ir. No habla inglés. Entiendo la mitad de lo que me dice: tenemos que atravesar el patio donde estamos, que es muy grande, pasar por debajo de un arco y aparcar al final del todo y allí nos recibirán. Hacemos eso y la verdad es que hay varios edificios. Me recuerda un poco a los conventos esos que salen en las pelis donde ingresaban a las chicas "conflictivas" que se quedaban embarazadas muy jóvenes y de padres desconocidos. Esperamos un rato pero allí no viene nadie ni vemos que se abra ninguna puerta. Y no está la cosa para esperar, que hace frío. 


Volvemos a la garita a ver qué pasa. Allí nos dice que tenemos que ir a un edificio donde pone una placa con un nombre que ahora no recuerdo. Hay tres edificios en esa zona picamos en una puerta. Cerrada y no hay nadie. Lo intentamos con otra. Nada. Al final en la tercera, está abierta y llegamos a la recepción. Ahí hay otra monjita que tampoco habla inglés. Al final para hacer el checking avisa a una mujer (ésta no es monja) que sí lo habla y nos podemos entender bien. Pregunto si dan de cenar, pero me dice que no. La monjita nos acompaña a la habitación. El edificio es muy grande y está todo en silencio y con poca luz. Da miedo, parece un internado o algo así... 



Nada más encender la luz de la habitación me encuentro con un cristo en la pared y....un sofá? no!!! son las camas, puestas una a continuación de la otra. No se pueden juntar porque están rodeadas de madera, excepto el lugar por donde nos metemos en ella. En casa del señor hay que ser castos, y no se nos permite cometer pecados carnales. Pero nos da igual, porque total es una noche y vamos a estar pocas horas porque a las 5:30 de la mañana nos tenemos que ir hacia el aeropuerto. La ducha y el baño están fuera de la habitación. Pero como detalle nos han dejado dos conejitos de pascua de chocolate. Gran detalle.


Decidimos ir a comer algo a Baden-Baden. Está todo muy muerto, aunque el parking donde hemos dejado el coche está casi lleno y vemos bastantes jóvenes. Hace viento y es frío, a ver si encontramos algo pronto. Comenzamos a andar por el casco antiguo y está todo cerrado. Son casi las 10 y es tarde para cenar. Increíble. Es lo que tienen los horarios europeos. Al rato encontramos un Mcdonald's y lo tenemos claro. Siempre está ahí cuando se le necesita. 


Después de cenar, volvemos al hotel, vamos al baño y nos dormimos enseguida. Mañana ya nos toca volver a casa. Han sido sólo dos días pero bastante intenso y bien aprovechados. Hemos visto nieve, sitios muy bonitos, hemos desconectado de nuestra realidad y lo hemos pasado bien. Qué más queremos. Esperamos hacer otra escapadita pronto....



domingo, 14 de abril de 2013

PRIMER DIA: ESTRASBURGO - GENGENBACH - TRIBERG

29 DE MARZO DE 2013



A las 4:30 suena mi despertador. Cuesta levantarse pero es por una buena causa: nos vamos a Alemania! Me visto, desayuno y me arreglo. Mientras Javi se despierta y se pone en marcha. A las 5:30 salimos para el aeropuerto de Girona.


Llegamos a las 6:30 al parking donde vamos a dejar el coche estos días. Ya lo hemos utilizado otras veces, pero esta vez han cambiado su ubicación a un lugar más cercano al aeropuerto. Se puede ir andando perfectamente, aunque nos llevan. Vale unos 10 € al día, aunque depende del rato que esté. De momento nos toca pagar 20 € de momento, pero seguramente nos devolverán dinero a la vuelta.




A las 8:30 sale nuestro vuelo. Durante el mismo Javi duerme y yo aprovecho para terminar el segundo libro de  la trilogía de Los Juegos del Hambre y empezar el tercero (todo desde mi Ebook, claro). A las 10:30 aterrizamos en Baden-Baden. Hace un poco de frío (7º) y está nublado. El aeropuerto es pequeño pero está bien. Nos encaminos hacia el mostrador de Herz, donde hemos alquilado el coche y nos toca hacer cola. Después de media hora, aproximadamente nos atienden y vamos a buscar el coche, que está en el parking exterior. Lo encontramos fácilmente. Es un Ford Focus de los nuevos plateado. Es bastante guapo, es gasolina y enseguida nos damos cuenta que tiene pocos cavallos porque no tira mucho.
Encendemos el GPS y rumbo a Estrasburgo! Llegamos en una media hora al centro de la ciudad, ya que sólo está a 48 km. Es una ciudad grande y por lo que se ve bastante bonita.



QUE VER EN ESTRASBURGO
 
En Estrasburgo también hay una parte del parlamento de la Unión Europea.
A parte de la ciudad moderna, donde se encuentran los edificios de la UE, lo más interesante es el barrio antiguo y la Petite France, con sus idílicos edificios de madera al estilo antiguo y su canal.

Como todo, depende de lo que queráis hacer y ver. Seguro que hay algún museo interesante, pero si os centráis en el barrio antiguo y la Petite France, la visita no os llevará más tres horas, tomándolo con mucha calma.


Aparcamos en un parking muy cerca de donde comienza la zona peatonal y empezamos a andar por ella. Es viernes santo y se nota que es festivo porque está todo muy muerto. Todo cerrado y a penas hay gente por la calle. Quiero llegar a la Petite France pero no sé donde está. No veo ningún mapa ni la oficina de turismo. Andamos bastante pero no encontramos nada. Volvemos hasta donde casi está el coche a ver si tenemos un poco más de perspectiva. Vemos un campanario de una iglesia que parece tener estilo antiguo y nos encaminamos hacía allí, seguro que está por aquella zona.



Después de caminar unos 15 minutos ya empezamos a ver un poco de más ambiente y el primer establecimiento abierto: una panadería con cosas deliciosas. Seguimos un poco más adelante y ya desembocamos en la zona turística con un montón de tiendas de souvenirs abiertas, edificios antiguos y gente. Y la catedral, que es enorme y tiene algún parecido con la Notre Dame de París. Empiezan a aparecer los primeros edificios bonitos, como los que salen en las fotos. Seguimos caminando y dejamos atrás la plaza de la catedral y damos con un canal. Por él navegan unos barcos con todo acristalado menos el casco que hacen un recorrido por 10 € por persona. Nosotros de momento, lo haremos caminando.



Cruzamos el canal y caminamos un poco más, pero ya allí vuelve a apagarse el ambiente. No encuentro lo que busco, lo que he visto en las fotos. Dónde están esas casas tan bonitas junto al canal? Bordeamos un rato el canal y entonces veo un cartel que pone "PETITE FRANCE". Por fin!! ha costado encontrarlo. No sé si nosotros somos torpes o qué, la verdad es que nos ha costado mucho encontrarlo. Quizás vosotros si váis lo encontréis antes, pero hay que tener en cuenta que es muy difícil encontrar algo sin indicaciones ni mapa, y tampoco hay manera de conseguirlo porque la oficina de turismo está cerrada.




Es la 1 de la tarde y tenemos mucha hambre porque desde las 5 que hemos desayunado, no hemos probado bocado. Decidimos comer por esta zona y ahora que ya sabemos dónde está la Petite France, la dejaremos para después. Miramos varios sitios, pero nos decidimos por un puesto de salchichas de frankfurt con muy buena pinta. Cogemos un bodadillo para cada uno, patatas y bebida por 9 € cada uno. En total 18 €. Es algo caro, pero recordemos que estamos en una zona súper turística y que esto es Francia. Y Francia, amigos, es cara.






Nos comemos los bocatas sentados en una pequeña plaza. Hace ya bastante rato, al llegar a Estrasburgo, que el cielo se ha despejado y hace sol. Hace bastante buen día. Después nos vamos hacia la Petite France, a la cual tardamos unos 10 minutos en llegar caminando y ahí, ahí por fin está lo que andaba buscando, lo que había visto en las fotos. Y es precioso!!



La zona es muy pequeñita, a penas hay un par de calles, pero vale mucho la pena. Después de caminar un rato y pasar por un parque que hay, damos media vuelta y volvemos al coche con destino a Gengenbach, la siguiente parada.
















En media hora estamos en Gengenbach y vemos un parking público al aire libre a la entrada del pueblo. Es zona azul. Aparcamos y ponemos dinero para media hora: 2 €. Entramos en la zona peatonal del pueblo y es muy bonito. Hay bastante ambiente, gente sentada tomando algo en las terracitas, las tiendas están abiertas, ... Nos perdemos por las 4 o 5 calles que tiene y es un lugar precioso. Parece sacado de un cuento, o de un escenario de un parque temático. Hay un pequeño museo, ahora no recuerdo de qué, pero si no lo visitas, el pueblo lo has visto en media hora; si te estiras mucho, 45 minutos. Para hacer tiempo por lo que hemos pagado de parking y porque vamos muy bien de tiempo, decidimos tomar algo en la heladería de la plaza, cuya terracita está muy animada. Javi pide un café con leche con una bola de vainilla y yo me decido por un batido de fresas, kiwi y nata, que además lleva trocitos de fruta dentro. Está muy bueno. Ahí disfrutamos de un buen rato de buena compañía, tranquilidad, desconexión del mundo real, relajación y vemos las fotos que hemos ido haciendo. Luego ya partimos para Triberg.




Al llegar a Triberg, al cual tardamos unos 40 minutos, el cielo está totalmente encapotado y hace bastante frío: 5º. Aparcamos también en zona azul, en la que ponemos 2 € de nuevo. De camino al pueblo, en las afueras, hemos visto un montón de tiendas de relojes de cuco. De hecho, este pueblo es famoso por eso. Este pueblo es más grande que el anterior. Se nota porque en la calle principal circulan los coches. Caminamos por esa calle y entramos en varias tiendas, pero una nos llama especial atención. Es grande, está hecha de madera y arriba tiene unos ositos que se van moviendo. Entramos y es enorme. Hay de todo, pero lo que más hay son relojes de cuco. Debe haber cien, por lo menos. Pasamos bastante rato en esta tienda mirando cosas y al final decidimos comprarnos un reloj, que cuesta 40 €.



Sé que en Triberg hay una cascada muy famosa, pero no sé dónde debe estar. En triberg hay nieve, no en las calles, pero si en las montañas y en las zonas un poco apartadas. Después de salir de la tienda, un poquito más arriba hay una taquilla y un camino. Miramos y es donde está la cascada Bien!! esta vez ha sido fácil. Entrar cuesta 1.50 € por persona. Nos parece bien pagar este precio porque es para conservar el parque, ya que se trata del inicio de un parque natural. Hacemos el camino que pronto nos lleva a la cascada, quizá 5 minutos o un poco más andando. Cae abundante agua y hay mucha nieve por todas partes. En el lateral de la cascada hay unas cuantas estalagtitas heladas. El lugar es hermoso. Hay un montón de caminos de senderismo para hacer. Estamos un rato por la zona paseando y haciendo fotos y decidimos volver al coche. Son las 6:30 de la tarde y habría que ir tirando para el hotel, que está aquí. Ponemos la dirección en el GPS y nos indica la calle en la que estamos pero más abajo. No puede ser porque en la foto sale una casa en medio de la montaña y eso es demasiado céntrico. Seguimos la carretera hacia arriba, dejamos atrás el pueblo y aprece que cerca hay unas pistas de esquí. Por ahí no tiene pinta de ser. Bajamos. Seguimos hacia abajo y dejamos atrás el pueblo. Pero tampoco parece ser. Después de subir y bajar unas cuantas veces, bajando, cuando ya hemos dejado atrás el pueblo, vemos una indicación del hotel, que se llama Landgasthof Berghof.




Menos mal que está muy bien indicado porque flipamos a donde tenemos que ir. Es una carretera de montaña que cada vez sube más y que cada vez es más estrecha. Dónde he reservado yo el hotel??? En el culo del mundo? Pues casi. Llegamos y aparcamos fácilmente y entramos en una casa de madera grande. Hay una señora mayor que me habla en alemán y hago lo que puedo para entenderme con ella porque a penas me acuerdo ya de hablarlo. Nos da la llave para la habitación, que esta en la casita contigua. La habitación está bien y tiene un balcón que da a una piscina (ahora vacía, como es lógico) y la montaña. Estamos un rato descansando y preguntamos hasta qué hora abren la cocina. Nos dicen que hasta las 7:30. Es muy pronto para nosotros (de hecho yo a esas horas meriendo muchas veces) pero decidimos cenar ahí porque tiene buena pinta y además seguro que nos encontramos con los mismos problemas en Triberg. Nos atiende la hija de la señora, que habla afortunadamente en inglés. Como la carta está en alemán y ya no me acuerdo de lo que significa casi nada, le pedimos consejo y cenamos carne rebozada con salsa y yo unas verduras, mientras que Javi lo acompaña con patatas. El restaurante es bastante chulo todo rústico y de madera. De postre pedimos helado. Junto con las bebidas nos sale a 22 € los dos, que está bastante bien. Os recomiendo el hotel porque es bonito, acogedor, se come bien, está en un lugar muy bonito y además te tratan bien.





Después de cenar ya es de noche, y decidimos volver a la cascada porque sabemos que estará iluminada. De noche no hay que pagar y la verdad es que se ve bastante bonito todo. Estamos un rato y empezamos el camino de vuelta al hotel y...empieza a nevar!!!  ¡¡¡QUÉ CHULI!!! Aunque yo me preocupo un poco porque si nieva mucho, no sé si podremos salir mañana de aquí por esta carreterilla...Aprovechamos que no estamos acostumbrados a ver nevar y lo disfrutamos. Nos pasamos un rato en la calle y luego en la puerta de la habitación. Luego ya decidimos irnos a dormir porque estamos muy cansados.

FOTOS ESTRASBURGO-GENGENBACH-TRIBERG


ESTRASBURGO














GENGENBACH













TRIBERG